Comissão científica
Colaboradores
La presente edición del OC Journal Hematología trae algunas discusiones promovidas durante el Encuentro Anual de la Sociedad Americana de Hematología (ASH, American Society of Hematology), que ocurrió a finales de 2020.
Una de ellas es acerca del REACH 3, estudio cuyos datos sugieren una nueva alternativa terapéutica para el tratamiento de segunda línea de los pacientes que, después de trasplantados, desarrollen la enfermedad del injerto en contra hospedero crónica (DECH). Él comparó el uso de ruxolitinib (10 mg al día) con el mejor tratamiento disponible. Eduardo J. A. Paton, coordinador técnico de Trasplante de Células Hematopoyéticas y Terapia Celular del Oncobio – MG e do Biocor – MG, comenta que el ruxolitinib presentó una tasa de respuesta global significativamente más alta en la 24ª semana de tratamiento que el BAT.
Ya los estudios TOURMALINE y APOLLO combinan datos importantes acerca de la adición de ixazomib y daratumumab a otras terapias para tratar pacientes con mieloma múltiple. El hematólogo Rafael Cunha del Centro de Tratamiento Oncológico (CTO) del Grupo Oncoclínicas en el Rio de Janeiro, destaca que, en el estudio TOURMALINE-MM2, “hubo un claro beneficio en la sobrevida libre de progresión, pero sin significación estadística. Los pacientes que presentaban alteración citogenética de mal pronóstico fueron los que más se beneficiaron de la asociación”.
La hematóloga Mariana Netto de Oliveira, médica del Centro Paulista de Oncología (CPO), del Grupo Oncoclínicas, relata que, en el APOLLO, la combinación del daratumumab SC con uso de inmunomodulador (pomalidomida) no aumentó la toxicidad del tratamiento: “Hubo apenas 6% de reacción infusional, principalmente en la primera infusión, con el uso de daratumumab SC, y 2% de reacción en el local de aplicación.”
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